Un joven asaltante, entró en una tienda de telefonía celular al sur de Florida, con la posibilidad de robar mucho, pero se llevó la sorpresa que la dueña de la tienda era evangélica, la cual lo persuadió con el mensaje de Jesucristo a desistir del robo.
“Tome lo que quiera. Yo sólo voy a hablar con usted acerca de mi Jesús antes de que salga”, le dijo Nayara Goncalves, -gerente de la tienda-, al atracador, quien había entrado a la tienda disimulando que compraría un celular, pero cuando Nayara, le iba a mostrar los modelos telefónicos, el hombre sacó una arma y le exigió que le diera todo el dinero de la caja registradora.
Al momento del asalto Nayara, le dijo al malhechor que era cristiana, él le dijo: “Dios los bendiga por eso”, agregando que también era cristiano y que asistía a Calvary Chapel, pero se disculpó y que odiaba robarle, pero era la primera vez porque no tenía otra opción y que muy pronto sería desalojado él con su familia.
Aunque Nayara, se ofreció a ayudarle a encontrar un trabajo, el hombre intentó llevarse el poco dinero que había en la caja registradora, pero después que la gerente de la tienda, le dijo que a ella le cobrarían por el dinero perdido, decidió no robarle. “Yo no quiero hacerle eso. Lo siento”, le dijo el hombre.
“Jesús, preparo algo mejor para ti, yo no te culpo, no estoy juzgándote, yo no sé lo que estás pasando, pero todos nosotros estamos pasando por un momento difícil justo ahora. Jesús, le puede ayudar. Él puede cambiar su vida”. “Vuelva a la iglesia. Encuentre trabajo. Obtenga verdaderos amigos en la iglesia. Hable con un pastor. Pueden orar por usted. No es necesario hacer esto. Jesús viene pronto”, le dijo Nayara.
Al final el hombre fue completamente convencido y al abandonar la tienda este le dijo a Nayara que su arma era una pistola de balines y le dijo: “Buena voluntad vendrá a su vida por lo que usted hizo hoy. Dios le bendiga”, expresó.
Al momento del asalto Nayara, le dijo al malhechor que era cristiana, él le dijo: “Dios los bendiga por eso”, agregando que también era cristiano y que asistía a Calvary Chapel, pero se disculpó y que odiaba robarle, pero era la primera vez porque no tenía otra opción y que muy pronto sería desalojado él con su familia.
Aunque Nayara, se ofreció a ayudarle a encontrar un trabajo, el hombre intentó llevarse el poco dinero que había en la caja registradora, pero después que la gerente de la tienda, le dijo que a ella le cobrarían por el dinero perdido, decidió no robarle. “Yo no quiero hacerle eso. Lo siento”, le dijo el hombre.
“Jesús, preparo algo mejor para ti, yo no te culpo, no estoy juzgándote, yo no sé lo que estás pasando, pero todos nosotros estamos pasando por un momento difícil justo ahora. Jesús, le puede ayudar. Él puede cambiar su vida”. “Vuelva a la iglesia. Encuentre trabajo. Obtenga verdaderos amigos en la iglesia. Hable con un pastor. Pueden orar por usted. No es necesario hacer esto. Jesús viene pronto”, le dijo Nayara.
Al final el hombre fue completamente convencido y al abandonar la tienda este le dijo a Nayara que su arma era una pistola de balines y le dijo: “Buena voluntad vendrá a su vida por lo que usted hizo hoy. Dios le bendiga”, expresó.
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