“Pueden estar el sábado en una fiesta de este tipo y el domingo acudir a la iglesia. Para ellos no es pecado ni adulterio porque van con su mujer o su marido. No están engañando y La Biblia no lo prohíbe expresamente”, dice la investigadora Harris.
Una investigación exhaustiva realizada durante 4 años por la fotógrafa Indagando e investigando durante cuatro años, la fotógrafa canadiense, Naomi Harris, releva que parejas cristianas participan en las fiestas sexuales de los “swinger”, como se les conoce en EE. UU.
Los “swinger”, son una parte de la sociedad norteamericana media que realiza fiestas con propósitos sexuales donde se arman orgías, tríos e intercambio de parejas blancas, republicanas y cristianas, entre las edades de 35 a 55 años, según publica Harris en su libro titulado: “America Swings”, que recopila muchas imágenes que tienen mucho que decir.
Naomi Harris, justifica que existe para ella ningún morbo en fotografiar esas fiestas sexuales porque para ella es como “si estuviese viendo a mis padres teniendo relaciones y eso no es muy excitante”.
Lo más sorprendente de la investigación es que en estas fiestas participan persona que dicen llamarse cristianas. “La mayoría son parejas de clase media, de entre 35 y 55 años, blancas, cristianas y republicanas”, asegura Harris, añadiendo que esos cristianos “pueden estar el sábado en una fiesta de este tipo y el domingo acudir a la iglesia. Para ellos no es pecado ni adulterio porque van con su mujer o su marido. No están engañando y La Biblia no lo prohíbe expresamente”, dice la investigadora Harris.
La fotógrafa, espera no cree que el libro cause polémica en la sociedad americana. Para ella lo importante es que los swingers “no piensen que se ha reído de ellos”, sino que hizo un trabajo “con mucho respeto”.
Las fiestas sexuales no tienen un calendario fijo para celebrarse se aprovechan los días festivos para armar la Sodoma y la Gomorra. “Esas fiestas empiezan con cenas, juegos, bailes, alcohol y terminan siempre con sexo”, finalizó Harris.
Los “swinger”, son una parte de la sociedad norteamericana media que realiza fiestas con propósitos sexuales donde se arman orgías, tríos e intercambio de parejas blancas, republicanas y cristianas, entre las edades de 35 a 55 años, según publica Harris en su libro titulado: “America Swings”, que recopila muchas imágenes que tienen mucho que decir.
Naomi Harris, justifica que existe para ella ningún morbo en fotografiar esas fiestas sexuales porque para ella es como “si estuviese viendo a mis padres teniendo relaciones y eso no es muy excitante”.
Lo más sorprendente de la investigación es que en estas fiestas participan persona que dicen llamarse cristianas. “La mayoría son parejas de clase media, de entre 35 y 55 años, blancas, cristianas y republicanas”, asegura Harris, añadiendo que esos cristianos “pueden estar el sábado en una fiesta de este tipo y el domingo acudir a la iglesia. Para ellos no es pecado ni adulterio porque van con su mujer o su marido. No están engañando y La Biblia no lo prohíbe expresamente”, dice la investigadora Harris.
La fotógrafa, espera no cree que el libro cause polémica en la sociedad americana. Para ella lo importante es que los swingers “no piensen que se ha reído de ellos”, sino que hizo un trabajo “con mucho respeto”.
Las fiestas sexuales no tienen un calendario fijo para celebrarse se aprovechan los días festivos para armar la Sodoma y la Gomorra. “Esas fiestas empiezan con cenas, juegos, bailes, alcohol y terminan siempre con sexo”, finalizó Harris.
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